Piano

No es miedo, es pánico.
No consigo detener a mi corazón
no es que pretenda callarlo,
pero en esa incesante búsqueda
de a saber qué pretende encontrar
me pierde, se pierde,
me olvido, se olvida.

Sale de mi cuerpo, generando el amago de una lágrima
y vuelve a pertenecer a mi, y sólo arrojo un suspiro;
leve alivio al escuchar que vuelvo a latir,
ligera ansiedad al percatarme que vuelvo a sentir.